¡El fútbol trasciende las barreras culturales y sociales!
El fútbol es un deporte que trasciende las barreras culturales y sociales, capaz de cambiar vidas y transformar comunidades enteras. En Colombia, el proyecto "Me Juego" ha sido una iniciativa que ha promovido el fútbol como una herramienta de transformación social en el norte del departamento del Cauca, una región multicultural y multiétnica.
Este proyecto ha brindado la oportunidad a entrenadores y entrenadoras de fútbol de recibir una formación integral para emprender en el mundo deportivo.
Tal es el caso de María Alejandra Capote Lucumi una joven de 27 años que dirige el Club Independiente salvajina, junto a Óscar Arango, en el municipio de Suarez, en el departamento del Cauca, donde impactan la vida de 120 participantes conformados por 40 niñas y adolescentes y 80 niños y adolescentes.
Para María y Oscar , las habilidades y conocimientos adquiridos en el programa "Me Juego" han sido claves para implementarlo en su emprendimiento deportivo, lo que ha generado un impacto positivo en la formación de niños, niñas, adolescentes y jóvenes que entrenan en su escuela deportiva.
Una de las principales habilidades socioemocionales que este equipo de entrenadores promueve a través del fútbol es el establecimiento de relaciones positivas, junto a los valores como la tolerancia, la honestidad, el respeto y la solidaridad. Todo esto es vital y se fomenta en cada sesión de entrenamiento para lograr aprendizajes significativos en las deportistas.
Para los dirigentes del Club Independiente Salvajina, El proyecto "Me Juego" ha tenido un gran impacto en la comunidad local, promoviendo la inclusión de más mujeres en los entrenamientos. También agrega que el proyecto ha brindado a los jóvenes la oportunidad de mejorar su calidad de vida y transformar su realidad, convirtiendo el fútbol en una herramienta social para la transformación.
“A través del proyecto financiado por UNICRI, se ha podido fortalecer el trabajo de los entrenadores y entrenadoras de fútbol, mejorando la calidad de la formación que brindan en un territorio donde no se les brinda apoyo de este tipo” así lo expresa María Alejandra.
Entre los desafíos que han enfrentado se encuentra la falta de asistencia de los padres de familia en los procesos de formación de los hijos, lo cual ha motivado a María Alejandra y a Oscar a buscar estrategias adecuadas que permitan seguir promoviendo el fútbol como una herramienta de transformación social.
El proyecto "Me Juego" ha sido evaluado como un éxito por el impacto positivo que ha tenido en la comunidad local. Promoviendo el fútbol como una herramienta de transformación social, promoviendo la inclusión de las zonas veredales para que más entrenadores y entrenadoras quieran contribuir con los niños, niñas y jóvenes, y así transformar de manera positiva las comunidades enteras.